Coria se hace fuerte en Buenos Aires, bajó a Norrie y quiere disfrutar el día a día

Federico Coria se tira al piso de la cancha Guillermo Vilas en el Buenos Aires Lawn Tenis. El argentino de 31 años pasó al segundo sembrado y finalista en 2023 Cameron Norrie por un luchado 6-2, 4-6 y 6-3 para pasar a cuartos de final del IEB+ Argentina Open y todo es alegría para él, casi que, con una sostenida sonrisa, no se quiere levantar del polvo de ladrillo. 

Sucede, también, que el torneo de Buenos Aires, y esta cancha en particular, es muy especial para la familia Coria. “Esta cancha marcó mi vida… Hace 20 años estaba acá mirando a mi ídolo, mi hermano Guille, ni soñaba yo con ser tenista, pero tengo muchos años de mi vida en este club y hoy pude bajar a un Top20, algo impensado hasta no hace mucho y creo que es la mejor victoria de mi carrera”, aseguró. 

“Por eso mi familia y mi equipo está contenta porque estoy creyendo en mi…. Cuando tenía 13 ó 14 años iba los torneos y me costaba mirar para afuera por ser el ‘hermano’ de, por suerte ya quedó atrás y estoy muy contento con mi carrera”, dijo el menor de los tres hermanos Coria.

Coria inicio el año 2023 con un objetivo fijo: acercarse lo más posible a su primer título ATP Tour. Sin embargo, luego de que los planes no fueran por el camino deseado, el foco viró por completo. “Después de haber sufrido las lesiones y tener que ver Madrid, Roma, Barcelona, Montecarlo por la televisión el año pasado… empecé a valorar mucho el día a día”, reconoció. 

Esa nueva filosofía esta definiendo su rumbo en este 2024. “Acá la inercia del circuito te hace olvidar un poco todo… que yo hace cinco años estaba tal vez jugando torneo Futures, estaba 400 del mundo o por ahí,  entonces hoy en día estoy más tranquilo tratando de disfrutar”, definió. “Parece una frase armada pero no me quiero cargar con ninguna presión extra más que dar todo y pasarla bien”. 

Por lo pronto, Coria se aseguró escalar hasta el puesto No. 95 del Pepperstone ATP Live Rankings: “Me relaja el volver al Top100 porque se que voy a entrar a Roland Garros, Wimbledon y el US Open… Siento que todavía no llegó mi mejor momento, el Tour está muy parejo, vemos todo el tiempo resultados que a mi no me sorprenden, pero hay muchos jugadores que tiene el potencial para subir y yo me la estoy creyendo”. 

En tanto, las dos últimas semanas en casa, Coria tuvo el aliento de múltiple pequeños hinchas, e interactuó con varios de ellos luego de sus partidos. 

“Los chicos me llegan siempre al corazón… me veo reflejado buscando un autógrafo con esa ilusión de cuando arranque jugando a esto tener una servilleta con el autógrafo de un jugador profesional era lo máximo y competir con mis amiguitos a ver quién juntaba más autógrafos creo que es una etapa hermosa y bueno”, dijo. 

¿Le están vaciando el raquetero de muñequeras, toallas y/o gorras ya? “Obviamente me gusta que todos se lleven un recuerdo… pero hoy tienen más suerte que cuando yo era chico porque hoy está la foto muy fácil. Hasta me avisan que la van a subir, y me piden que se las repostée en Instagram”; dijo entre risas.

Entre los planes de Coria, además de seguir ganando partidos dentro de la cancha, también hay un rumbo fuera de ella: “me voy a casar este año con mi novia Flor y pronto encararemos el proyecto de tener una familia porque me encantan los bebés, me encantan los nenes y tengo muchas ganas también de ser papá”. 

Con las ideas claras y los sueños intactos, Coria se hace camino al andar y no quiere frenar.