Koepfer, Sin Miedo A Jugar Contra Alcaraz En El US Open: “Él No Es Perfecto”

Hace un año, Dominik Koepfer se encontraba en uno de sus puntos más bajos. El zurdo alemán, acosado por una misteriosa lesión en el brazo izquierdo, perdió en la primera ronda de la clasificación del US Open ante el italiano Raúl Brancaccio, que estaba clasificado fuera del Top 200 del mundo.
 
“Ya había aceptado que mi clasificación era bastante mala. Para entonces ya había perdido suficientes puntos. Pero no era divertido”, dijo Koepfer a ATPTour.com. “Todo el mundo juega al tenis para jugar estos eventos y en los cuadros principales de Slams y eso es lo más divertido. No es divertido jugar en la Cancha 3 de un Challenger. Es simplemente diferente”.
 
“Pero hay que aceptarlo y tratar todos los partidos de la misma manera”.
 
Un año después, la ex estrella de la Universidad de Tulane está lista para enfrentarse al No. 1 del mundo y campeón defensor Carlos Alcaraz en la primera ronda del cuadro principal en Flushing Meadows. Volver a un momento tan importante ha implicado atravesar muchas adversidades y, como dejó claro el jugador de 29 años, mucho dolor.
 
Los problemas comenzaron en Viena en octubre de 2021. Apenas unos meses antes, Koepfer había alcanzado el puesto 50, el más alto de su carrera en el Pepperstone ATP Ranking. Cuando empezaron los dolores, el zurdo pensó en terminar el año en el Rolex Paris Masters y tomarse un tiempo libre para recuperarse. Incluso con dolor en el húmero izquierdo (parte superior del brazo), Koepfer derrotó a Andy Murray y Felix Auger-Aliassime en el último evento ATP Masters 1000 de la temporada y empujó a Hubert Hurkacz a tres sets.
 
“Jugué un gran torneo, pero el brazo estaba terminado. Jugué con muchos analgésicos y me revisaron allí. Dijeron que en realidad no pasaba nada”, dijo Koepfer. “Me tomé unas semanas de descanso, me hice una resonancia magnética, no pasaba nada y luego me fui a Australia aunque realmente no pude cumplir la pretemporada. En Australia me diagnosticaron un hematoma en los huesos, pero aparentemente nunca fue así”.
 
Ese fue el comienzo de lo que parecía un ciclo sin fin. Koepfer jugaba con dolor, se tomaba un tiempo de descanso, se hacía varios escáneres y no aprendía nada sobre cuál era realmente su lesión.
 
“Ningún médico sabía realmente qué era. Probablemente sea inestabilidad en mi hombro y tal vez también algunos nervios que están un poco atascados. Realmente nada ayudó”, dijo Koepfer. “Literalmente intenté todo lo que pude. No se pudo realizar ninguna cirugía porque si no hay un diagnóstico, en realidad no se puede hacer nada para solucionarlo”.
 
Koepfer podía realizar tres horas de golpes de derecha y de revés sin problemas. Pero en cuanto le tocaba sacar, todo empezaba a dolerle.

“Los primeros 20 a 30 minutos estuvieron bien y luego es como un brazo muerto. Realmente no podías hacer un movimiento. Y luego es simplemente un dolor punzante. Incluso por la noche, a veces, cuando jugaba demasiado, sentía un dolor constante y ya no era tolerable”, dijo Koepfer. “Si te rompes el brazo, sabes que te operarán y probablemente estarás bien en dos o tres meses. Esto es intermitente y sin saber realmente”.
 
“Fue frustrante ver a tanta gente diferente. En cada Slam vi a todos los médicos. He visto a muchos médicos y fisioterapeutas y nadie realmente podía entender qué era realmente o qué tenía de malo. Aún así, en este punto, es sólo una especie de juego de adivinanzas”.
 
A principios de este año, cuando el ranking cayó hasta el puesto 262, pasó dos meses en Suiza para rehabilitar su brazo y encontró ejercicios que le ayudaron con el dolor.
 
A finales de marzo, Koepfer jugó un evento ATP Challenger Tour en la Ciudad de México, donde estuvo detrás de un jugador clasificado fuera del Top 400 del mundo en la primera ronda de clasificación y casi pierde antes de salir adelante en tres sets. Terminó ganando el título.
 
“Sólo me hacía falta una victoria para volver a jugar bien y tener confianza y fe en mí mismo”, dijo Koepfer. “Fue muy rápido, no me lo esperaba. Esperaba ganar algunos partidos y llegar allí tal vez para fin de año”.
 
Koepfer ahora está de vuelta en el No. 75 del mundo tras otro título Challenger, dos finales más y una carrera hacia las semifinales del ATP 250 de Los Cabos.
 
Ahora el alemán jugará dentro del estadio exclusivo de tenis más grande del mundo contra Alcaraz, el máximo favorito del US Open.
 
“Él no es perfecto. Ningún tenista es perfecto. He jugado contra Novak antes y le gané un set. Jugué con Roger, ya he jugado con esos tipos antes. Es un sentimiento diferente porque es simplemente el nombre lo que te pone un poco más ansioso o nervioso o hace que enfrentarlos sea más especial”, dijo Koepfer. “Pero él también es sólo un jugador de tenis. Él también fallará algunos puntos, como cualquier otro chico. Obviamente, es un poco más rápido que la mayoría de los muchachos. Pero simplemente saldré, me divertiré y haré lo mejor que pueda”.
 
Koepfer tiene mucho respeto por Alcaraz, a quien llamó “el mejor jugador a seguir en este momento”. Teniendo en cuenta dónde se encontraba hace un año, el jugador de 29 años siente que no tiene presión.
 
“El trabajo del último año ha dado sus frutos. Vengo de ser el No. 260 y de jugar hace un año la primera ronda de clasificación aquí. Será una situación en la que todos ganan. No tengo nada que perder. Estoy emocionado de enfrentar a Alcaraz”.